Cafeteria La Muralla

Servicio excelente y amable. Tardaron un poco más de lo esperado en servir las raciones, pero valió la pena. Pedimos lluçets (fuera de la carta) y estaba increíbles. También muy bueno el pulpo al all-i-llebre y una sepia a la plancha. Muy recomendable. Por cierto, las vistas de lo mejor de Peñiscola.

El restaurante es terrible, éramos 12 para cenar y nos trajeron los bocadillos sin plato ni siquiera una servilleta. Además, la camarera se permitió tocarlos con sus manos para ver de qué eran antes de repartirlos. Un lugar muy poco recomendable al que no volveré.

Probamos unas papas con queso, un bocadillo de bacon y queso, un tinto de verano y una coca-cola zero. El total fue de 13,5. Aunque la cantidad era un poco escasa para el precio, la calidad era buena. La atención de los camareros fue adecuada y amable. En contraste con otros comentarios que leímos, no se nos pidió el dinero por adelantado y el servicio fue muy bueno. Calificaríamos con un 3,5/5.

Nos sentamos en el Bar La Muralla. Nos toman nota. Nos sacan las cervezas y antes de descargarlas en la mesa nos piden el dinero... Bien es cierto que, en todos los bares de la Muralla (entendiendo la Muralla como la plaza entera y no como el nombre del Bar sobre el que hago esta reseña) te piden siempre el dinero nada más que te sacan la cerveza, pero nunca nos lo habían pedido con tanta bordería, los camareros de la plaza suelen ser dicharacheros y majos, de tal manera que ya te acostumbras a pagar sin que te lo pidan (no como este del bar La Muralla , que no te ha dejado la cerveza en la mesa y ya te lo está exigiendo). A mí, que me iba al baño nada más llegar con la familia a la terraza, me ha pasado el camarero por delante para ir a pedir y en un cruce de palabras ya me ha parecidouy maleducada la forma en la que se ha dirigido a mí. Después de sacarnos la cerveza y tenerla retenida hasta pagar el rescate del 1 '30eur que vale (hasta ahora era 1eur la cerveza en todos los bares de la plaza de la Muralla) le preguntamos si sacan tapa y dice el camarero, poco simpático, que la tapa se paga y reitera, aquí la tapa se paga . Conclusión: hay más oferta de bares en la plaza de La Muralla. No vengáis al bar La Muralla, que no merece la pena.

Fuimos 9 amigos a este bar que está situado privilegiadamente en la Muralla, concurrida zona de picoteo y punto de encuentro. Los carteles indican promociones y precios que ' 'no están disponibles ' '. Sólo tenían una marca de cerveza a 1,30 € el tercio!!. Malísima atención, chulesca, borde... Pedimos la cuenta y el importe no coincidía con lo que tomamos, intentando cobrarnos más!!. Lo extraño fue que al llamarlo para comentar la diferencia, el camarero, con la arrogancia que lo caracterizaba, se adelanta y dice el precio correcto. ¿Era necesario que te hagamos saber que nos dimos cuenta del error o podías haberte acercado y rectificar el importe? Eso nos hizo pensar que su intención era cobrarnos más y punto. Finalmente recogieron las mesas de alrededor y nos indicaron que estaban cerrando. Como guinda a este pastel, que jamás volveré a comer, no nos permitieron acceder a los baños porque ' 'el suelo está fregado ' '. Genial ' 'Bar la Muralla ' ', el perfecto ejemplo de como perder clientes.