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Contribuer aux commentairesMala experiencia. El ceviche resultó ser gambas con aguacate y una salsa aguada. Las carrilleras estaban frías y la carne de mi amigo le desagradó. El postre no tenía sabor. El vino tenía moho en la botella. Lo único bueno fue el pan. No regresaré.
Una vulgaridad de cocina que más parecía la de un comedor de campamento. La comida llegó con retraso y la calidad de los platos fue muy deficiente. No volvería ni aunque me lo regalaran.
Menús muy bien de precio, opcion de personalización, se adaptan a dietas especiales dando muchas facilidades. Trato súper amable, profesional y en un entorno increíble.
Comida familiar de 45 personas. El menú fue malísimo, el servicio lento. Solo una camarera para todos. Pero esto no fue lo peor. Al contratarlo NO nos dijeron nada de que nos teníamos que ir a las 5. Por cierto estábamos todavía comiendo. Tampoco nos avisaron que solo podíamos estar en un espacio próximo al comedor como de 50 metros. Sabían que íbamos con niños. Tampoco avisaron que no podíamos ir a la cafetería. Solo nos lo dijeron después de cobrar las consumiciones. Pero aún peor el trato por parte de una directiva del club. Ninguna clase ni categoría. Si llegamos a saber las condiciones y la comida no lo hubiésemos contratado. Y encima esos humos.....
Celebramos una comida familiar el el club Martiartu y ha sido una experiencia humillante y el trato por parte de varios socios vejatorio. En ningún momento al concertar la comida para 50 personas , nos informaron de las condiciones y normas del restaurante y el club. No fueron honesto, si nos hubieran explicado las cosas no hubieses ido allí a celebrar la comida. Tardaron una hora en servirnos la comida, que fue malísima. Unas croquetas malas y unas paellas, sosas, pasadas. Una sola camarera para servir a 50 personas. Según las normas del club, debíamos abandonarlo a las 5 de la tarde y teníamos prohibido hacer uso de las instalaciones del club, solo podíamos estar en el comedor. Nada de esto se nos dijo y al ir a la cafetería a tomar café y hacer allí la sobremesa fuimos increpados de muy malas formas por varios socios. Si quieren ofrecer un servicio e hostelería a personas que no son socias, deben mejorar la calidad de la comida y el servicio, pero ante todo explícitar las normas del club cuando se hace la reserva. Las formas en que nos increparon por hacer uso de la cafetería y quedarnos más de las 5, fueron agresivas , faltonas y humillantes. Mucho alardear de club privado, pero la educación y la gestión de los socios y de la junta dejan mucho que desear. No lo recomiendo en absoluto. Además de estar bastante obsoleto y caduco.