Images
ContribuerRéserver
Évaluations
Contribuer aux commentairesEl fin de semana estaba con unos amigos comiendo. puedes comer afuera, en nuestro caso comimos dentro, en el piso de abajo. el pequeño, acogedor lugar, y encima tuvimos suerte de ser los únicos allí abajo. Ya íbamos al menú Txuleton de 2 personas. jamón, patatas, pimientos verdes y 1.2 txuleton para dos personas. como éramos 5 pedimos dos menús y unas pocas entradas: calamares al romano, estudes en tempura y croquetas de jamón. Las croquetas eran suaves y ricas, no empacaban, pero tampoco tenían mucho gusto. Les preguntaría otra vez, rico. calamares muy ricos, notables. son siempre ricos, pero en algunos lugares son sin más comida, disfrutar y ya lo es. Pero estos, realmente, realmente llegaron muy bien. los piperradas, los studs, en tempura jugaste el juego para ver lo que picaba y no. rico. el muy buen jamón, viene con pan, por supuesto, y salmorejo aparte. Muy rico. patatas fritas y pimientos verdes, muy ricas. nada especial. el txuleton viene marcado y cortado, y con quemador para cada uno se hace si pieza en el punto que desea. Yo era rico, entré solo. los más pobres quizás los postres, por su pequeña elección. Le señalé el flan típico. un flan con una bola de helado de vainilla. ricos, no más. No soy rojo, eligieron mi compis, en el menú había una tierra que sólo sé que venía en fácil (repito o idea de vinos, soy más de sidra). En general, sé lo bien, pero tal vez algo caro. He comido otros txuletons con un intermes igual o más rico y más barato. pero sí, se puede probar y se puede repetir.
Comida rica y buen servicio. No se puede pedir más. Además, el restaurante se encuentra situado junto al puente colgante, lugar turístico por excelencia.
Un lugar muy bien ubicado en Getxo, que te invita a disfrutar de la tranquilidad y de las vistas del puente de Vizcaya. Muy buenas las tapas y muy buena atención de David, un profesional del sector
Menú del día muy bueno, personal muy amable, todo perfecto.
La ubicación de este bar-cafetería es excepcional, con unas cristaleras desde las que se puede ver el puente colgante y la ría. Tiene una terraza en los soportales de la plaza también muy gustosa. Los barmans son muy cercanos y agradables. Le pongo 4 estrellas por el ambiente ruidoso del interior que hacía muy difícil hablar. No tanto por la música sino por la vajilla chocando y los camareros gritando los pedidos... un poco incómodo.